Entre muchas otras cosas, dice el refranero popular que somos los libros que leemos. Podría añadirse que también la música y el cine es capaz de dejar poso y de convertirse en referente. Nuestra colección de láminas MacDiego’s Dogs reúne las creaciones de numerosos ilustradores que han rendido su particular homenaje a algunos de sus iconos culturales. Y puede encontrarse una lámina para todos los gustos.

Tanto si disfrutamos de las aventuras de Don Quijote y Sancho Panza, o nos conmueven los cuadros de Frida Kahlo, si vibramos con la música de Iggy Pop o si nos maravilló en su día el genio de Charlie Chaplin, seguro que entre las propuestas de MacDiego’s Dogs encontramos la lámina que refleja perfectamente nuestros gustos. Quiénes somos y qué nos emociona.

Cesto Yuste combina en la lámina “Rock ‘n’ duende” el ritmo de Camarón y de Elvis Presley mientras que su “Serie Personaje” entabla un diálogo entre figuras que incluyen a Frida Kalho, David Bowie, Baudelaire, Gloria Fuerte incluso a la activista Greta Gunberg.

Leviathan, por su parte, ilustra la esencia de sus iconos musicales con creaciones dedicadas a Robert Johnson, Hank Williams, Nick Cave e Iggy and the Stooges, entre otros, con una serie que sirve de repaso a algunas de las grandes figuras de la historia de la música.

Hasta la bella Florencia nos transporta la lámina “Donatello Bar. Firenze” de Daniel Torres, a un café que reúne a personalidades y a talentos de la talla de Charlie Chaplin y Robert Mitchum.

“Se buscan escritores vivos o muertos” de Miguel Gallardo se convierte en una carta de amor a la literatura y algunos de sus autores inmortales, que abarcan de Wlliam Shaakespeare a Virgina Wolf y Miguel de Cervantes, entre otros.

Y sin abandonar a la máxima figura de la literatura española, Miguel Ángel Martín recrea a sus ilustres personajes con la lámina “Rocinante, Sancho Panza y Don Quijote”.

Incluso King Kong, símbolo cinematográfico donde los haya, encuentra su sitio en MacDiego’s Dogs, con la ilustración dedicada a este gorila gigantesco por Javier Olivares.